Un mensaje especial
Con motivo de la festividad de San Joaquín y Santa Ana, padres de la Virgen María y patronos de los abuelos, el Papa Francisco aprovechó para enviar un mensaje por Twitter.Los abuelos son un tesoro en la familia. Por favor, ¡cuiden de los abuelos, ámenlos, hagan que hablen con los niños!
— Papa Francisco (@Pontifex_es) 26 de julio de 2018
El papel de los abuelos
Efectivamente, los abuelos son un gran tesoro. Sin embargo, muchas veces no se le valora. Principalmente por que no se reconoce a simple vista.
Y es que los abuelos tienen un notable papel en la transmisión de la fe. Ya lo había dicho antes Benedicto XVI: “los abuelos son depositarios y con frecuencia testimonio de los valores fundamentales de la vida”.
Por eso hoy vamos a recordar las formas en que los abuelos participan en esta importante misión.
Una bendición
“El recuerdo del justo sirve de bendición” (Proverbios 10:7)
Sus amplias experiencias proveen de bendición a su familia.
Esta bendición puede tomar muchas apariencias. Puede ser espiritual, orando y rezando por los miembros de la familia. Puede ser emocional, escuchando a los problemas de los demás y dando consejo. Incluso un simple abrazo puede ser una gran bendición.
No importa la forma en que se exprese, los abuelos proveen de bendiciones a su familia.
Un estándar
“Todavía en la vejez producen fruto, se mantienen frescos y lozanos, para anunciar lo recto que es Yahveh: mi Roca, no hay falsedad en él.” (Salmos 92:14-15)
Por medio de su vida, los abuelos dan el ejemplo de cómo debe crecer la fe con los años. Inspiran fe y contagian su valentía. Demuestran en su persona disciplina propia, y son una guía de integridad para las futuras generaciones. Ellos imponen el estándar que se debe alcanzar como persona.
Una luz
“¡Oh Dios, desde mi juventud me has instruido, y yo he anunciado hasta hoy tus maravillas! Y ahora que llega la vejez y las canas, ¡oh Dios, no me abandones!, para que anuncie yo tu brazo a todas las edades venideras, ¡tu poderío y tu justicia, oh Dios, hasta los cielos!” (Salmos 71:17-19)
Como creyentes, todos hemos sido llamados a ser una luz en la oscuridad.
Sin embargo, los abuelos deben también de transmitir esa luz, especialmente dentro de su familia y comunidad. Así, se convierten en guía de las futuras generaciones. Transmiten esa luz a hijos y nietos, permaneciendo firmes en sus convicciones y mostrándolo al mundo.
Un legado
“El justo camina en la integridad; ¡dichosos sus hijos después de él!” (Proverbios 20:7)
Así lo dejo en claro el Papa Francisco cuando dijo: “los santos Joaquín y Ana forman parte de esa larga cadena que ha transmitido la fe y el amor de Dios, en el calor de la familia, hasta María que acogió en su seno al Hijo de Dios y lo dio al mundo, nos los ha dado a nosotros. ¡Qué precioso es el valor de la familia, como lugar privilegiado para transmitir la fe!”.
También te puede interesar:
Añadir un comentario